FECHA |
6-9 de Marzo de 2020 (3 noches) |
DISTANCIA A 1er DESTINO / TOTAL |
218 Km / 567 Km |
RESUMEN |
Vuelta a la zona de Narbonne para deleitarnos de los paisajes de Marisma (Peyrac y Saint-Pierre-la Mer), pasear por la preciosa Narbona y hacer cicloturismo en el entorno de «La Clape». Uno de los mejores destinos a 2 h. de Barcelona. |
ALOJAMIENTO |
1a Noche – Area de campingcar de Peyrac Justo delante de las pasarelas de las salinas de Peyrac -Lugar natural de 1a categoria y a 10 min. del pueblo) [Excelente] 2a Noche – Area de Campingcar de Saint-Pierre-la-Mer (Apartada del bullicio, en un entorno natural precioso junto a las lagunas, el mar y el macizo de «La Clape») [Excelente] 3aNoche – Muy accidentada. La primera vez que nos molestan por la noche. Intentamos dormir en Arenys de Mar, en la zona del descampado junto al mar después del Portinyol. Grupo de jovenes dando por saco con coches, motos y música con dudosas intenciones. Nos fuimos rapidito y acabamos durmiendo en el frontón de Can Ginebra. |
ACTIVIDAD |
CICLOTURISMO |
TURISMO |
Descripción
Retornamos a una zona conocida con la intención básicamente de realizar una ruta de cicloturismo y darnos una vuelta por las lagunas y marismas del Grand Narbonne. La primera noche decidimos pasarla en Peyriac. (Mágnifico pueblo adyacente a las antiguas salinas con sus magnificas pasarelas de paseo sobre el agua) Llegamos al atardecer y aprovechamos para darnos un paseo por las pasarelas y por el pueblo ya de vuelta. Para dormir elegimos el área de Campingcar del mismo pueblo. Muy tranquila y agradable en la zona deportiva y pegadita a las lagunas. Después de cenar, partidita y a dormir con una tramontana de fondo bastante considerable, que ya nos había molestado bastante por la tarde durante el paseo. El sabado por la mañana antes de almorzar dimos otro paseito por las pasarelas y tras desayunar pusimos rumbo a Narbona ciudad, por las carretras locales que atraviesan las lagunas (paisaje maravilloso!!) y atraviesan el pueblo de Bages (no lo visitamos, aunque parece interesante). Aparcamos a la entrada de la ciudad, junto al canal y nos dirijimos al mercado central (Les Halles) para ver el ambientillo y comprar una buena cena (Filete de Ternera, foie fresco y algo de fruta). El mercado es muy auténtico y tiene una pinta pareccida a los nuestros (paradas de pescado, de verduras, de carne.. muy mediterráneo). En una salida lateral frente al mercado hay una tienda de vinos de la región en la que compramos algún rosadito. A continuación dimos un paseito de recordatorio de Narbona por las inmediaciones del palacio episcopal, las callejuelas y el canal de la Robine. Como era la hora de comer, averiguamos que había un restaurante con buena pinta en el conocido pueblecito de Gruissan, en la zona de las casas alzadas (zona curiosa con mas de 1000 casas de veraneo elevadas de los años 50s) y para allí fuimos. El restaurante es tipo los de Leucate, aunque algo más agradable porque se encuentra en un espigón frente al mar abierto junto al «estanque de Grazel». Comimos muy bien y auténtico (tipica mariscada francesa) y a muy buen precio (unos 20€!). Después de comer, siestecita con vendaval y al despertar nos fuimos hacia la zona de pernoctar, en este caso, el área de camping car de Saint-Pierre-la-mer. Ubicación maravillosa junto a otra laguna, en un espacio muy natural y tambien a 10 minutos de paseo del sitio natural del «Gouffre de l’Oeil-Doux» (no fuimos a verlo, quizás la próxima, porque es una zona para volver muchas veces). El Domingo por la mañana tocó la salidita de cicloturismo que teníamos planificada. Pensábamos que el viento lo impediría, pero para nada. Nos hizo un magnífico día de ciclismo. La ruta fué excelente, salimos bordeando las lagunas, donde había bastantes flamencos. Seguimos por una zona agrícola muy plana y extensa, atravesamos pueblecitos típicos franceses muy equilibrados como de costumbre y volvimos bordeando el macizo de la Clape, haciendo algún pequeño repecho muy manejable. La idea era pasar una segunda noche en la zona y visitar el macizo de la Clape con calma antes de volver a Barna, puesto que es una zona curiosa, semejante al garraf pero con más vegetación. No pudo ser, pues el fin de semana coincidio con la pérdida de la María (La madre de Segys) y decidimos quedar con el y Josep por la tarde en Port Balís (punto medio de encuentro) y así poder darle un abrazo. Llegamos a Port Balís sobre las 19h (volvimos atravesando la Calpe por una carretera revirada de montaña muy guapa) y todos juntos decidimos ir a cenar a la pizzería Gio de Arenys. Después de la cena nos despedimos y la idea era ir a dormir en el descampado frente a la platja del Cavalló. Eso hicimos , pero por poco rato puesto que cuando llevabamos 1h durmiendo aparecieron un grupo de poligoneros/as con coches, motos, música a tope y intenciones dudosas que nos hicieron desistir de estar allí y en una revolada encendimos la furgo y nos largamos. Como ya estábamos con la cama abierta, etc.. decidimos ir a Can Ginebra y dormir en el fronton. Fué una buena decisión, dormimos perfectamente y a la mañana siguiente desayunamos y para Barna. |
Alojamiento
Turismo
Cicloturismo
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Restauración
En gruissan, en la zona de las casal elevadas y junto a la desembocadura del Estanque de Grazel se encuentra este curioso restaurante tipo los de Leucate https://www.laperlegruissanaise.fr/ . Se come marisco a la francesa en un entorno muy típico y con buenas vistas marítimas. A partir de primavera hay una terraza que da al mar abierto y debe ser muy agradable. Además creemos que a partir de una fecha hay más posibilidades de platos. Nosotros comimos una bandeja de marisco y una botellita de rosado que nos sento de maravilla por un precio muy decente (unos 20€ por persona).